20.01.02.Los partidos dinásticos de Alfonso XIII.
LOS PARTIDOS DINÁSTICOS DE ALFONSO XIII. Los partidos políticos españoles. Los partidos españoles de principios del siglo XX, eran más bien agrupaciones en torno a un líder....
Gobierno de Raimundo Fernández Villaverde[1],
marqués de Pozo Rubio. Conservador.
20 julio 1903 a 4 diciembre 1903
Presidencia del Consejo, Raimundo Fernández Villaverde, marqués de Pozo Rubio.
Gobernación, Antonio García Alix.
Agricultura, Industria y Comercio y Obras Públicas, Rafael Gasset Chinchilla.
Estado, Manuel Mariategui Vinyals, conde de San Bernardo.
Gracia y Justicia, Francisco de los Santos Guzmán Carballeda.
Guerra, Arsenio Linares Pombo, interino / 21 de julio: Vicente Martitegui y Pérez de Santa María[2] / 24 de julio: Manuel de la Cerda Gómez Pedroso, interino / 6 de agosto 1903: Vicente Martitegui Pérez de Santa a María.
Marina, Eduardo Cobián Roffignac[3].
Hacienda, Augusto González-Besada Mein[4].
Instrucción Pública y Bellas Artes, Gabino Bugallal Araújo[5], conde de Bugallal / 29 de septiembre: Guillermo Rancés Esteban marqués de Casa Laiglesia, interino / 7 de octubre: Gabino Bugallal Araújo.
El ascenso al poder de Raimundo Fernández Villaverde era un cambio total en el equipo de Gobierno. Era la demostración de las discrepancias dentro del Partido Conservador. Ni siquiera los conservadores sabían por qué se había cambiado el Gobierno, pues ni el Parlamento ni el Rey habían mostrado discrepancias con él. Pudo ser un ataque de depresión de Silvela, pero acabó interpretándose como una lucha entre Maura y Villaverde por el control del Partido Conservador.
El Gobierno Fernández Villaverde también se interpreta como una cacicada de Alfonso XIII que se había querido quitar a Maura de en medio, cuando Silvela y muchos conservadores creían que el jefe del partido y de Gobierno debía ser Maura.
En todo caso, era un Gobierno inestable, pues tanto los Liberal fusionistas como los republicanos, querían echarle abajo, y la unidad del partido de apoyo al Gobierno no existía.
El nuevo Gobierno redujo efectivamente el gasto público, y prometió una reforma de impuestos que permitiese hacer 70.000 Km. de caminos vecinales en España.
Si el Gobierno se había hecho por intervención del Rey, no paró ahí la injerencia del Rey. En octubre, con motivo de la huelga de los mineros de Bilbao (huelga frecuente y casi habitual) el Rey confió la solución de la huelga al general Zappino, y le ordenó aceptar las exigencias de los obreros para dejar bien a la monarquía y al ejército. El detalle no dejó de ser advertido en la prensa y en las Cortes, que empezaron a pensar mal de Alfonso XIII. Comenzaba la carrera de desprestigio real.
El 24 de noviembre de 1903, Montero Ríos creó el Partido Liberal Democrático y negoció con la minoría de Moret un pacto de conveniencias para poder asumir el poder, pero no una verdadera unión del Partido Liberal.
Elecciones municipales de noviembre.
En noviembre de 1903 hubo elecciones municipales. La campaña fue un enfrentamiento entre Maura y los republicanos.
Silvela presentó a Maura como el líder del Partido Conservador, y Villaverde se sintió postergado. El 11 de noviembre de 1903, Silvela renunció a la jefatura del Partido Liberal Conservador y proclamó nuevo líder a Antonio Maura.
Villaverde intentó manipular las elecciones, pero los republicanos sacaron muchos candidatos, en contra de las instrucciones que Villaverde había recibido del Rey. Además de postergado, Villaverde se sentía fracasado.
El republicano Nicolás Salmerón no quiso hacer daño, y se negó a hacer los pronunciamientos militares que se le ofrecían. No era mediante la violencia como quería llegar a un Gobierno de republicanos. Salmerón era una persona amante de la legalidad, de la honradez. Entonces Costa dijo que el Partido Republicano Federal no llegaría nunca a nada. Y desde entonces, Costa escribió en la prensa contra Maura y contra los republicanos, y a fines de 1904, les llamaba “gallinas, capones y eunucos”.
También el republicano Alejandro Lerroux comprendió que la Unión Republicana Federal no llegaría al Gobierno, su aspiración prioritaria, y sin salirse de la Unión Republicana, comenzó a elaborar otros planes, que incluirían una acción revolucionaria y un partido republicano “más activo”. Para lo primero viajaría a Argentina a conseguir dinero para hacer campañas contra Alfonso XIII, y lo intentó en París en 1904, y en Madrid en 1905. Para conseguir formar un partido republicano activo, decidió iniciar un partido propio en Barcelona, la ciudad que se mostraba más agresiva en esos momentos.
Dimisión de Villaverde.
Villaverde no pudo aprobar el presupuesto anual del Estado, y presentó su dimisión el 3 de diciembre de 1903.
Consultó entonces el Rey al Partido Liberal, y encontró que estaba dividido entre Montero Ríos, Moret y Vega de Armijo, existiendo otros líderes como Romanones y Merino que no disputaban la jefatura pero que estaban incluso más preparados que ellos, y decidió seguir confiando el Gobierno a los conservadores. El turno de partidos se había roto, pues era el tercer Gobierno conservador consecutivo. Pero el líder del Partido Conservador era Antonio Maura, y aunque al Rey no le gustaban los proyectos de Maura, le designó Jefe del Gobierno.
[1] Raimundo Fernández Villaverde nació en Madrid en 1848. Fue diputado en 1872 por Caldas de Reis por el Partido Conservador. Subsecretario de hacienda en 1880-1881, gobernador civil de Madrid en 1884, fue ministro de Gobernación de Cánovas 1884, de Gracia y Justicia en julio 1890 y de Gobernación en noviembre 1891. En el momento de la crisis del partido, entre Cánovas y Silvela en 1892 y la creación de Unión Conservadora en 1897, Villaverde estuvo con Silvela. En 1899 había sido ministro de Hacienda con Silvela y se encontró con la ingenuidad económica de éste. Liquidó el Ministerio de Ultramar que ya no tenía sentido. Lo más importante para la historia fue su proyecto de Ley de Presupuestos para 1899-1900 en el que el Gobierno asumía las deudas coloniales, suspendía la amortización de la deuda pública y realizaba una reforma tributaria introduciendo el Impuesto de Utilidades sobre el provecho que cada uno obtiene de un bien. Este proyecto encolerizó a la burguesía, sobre la que gravaba el nuevo impuesto y ésta organizó disturbios contra Villaverde. Como ministro de hacienda fue estupendo y logró superavit en sus años de gobierno, por eso fue otra vez ministro de Hacienda en 1902 y por eso llegó a Presidente del Gobierno en 1903. Murió en Madrid en 1905.
[2] Vicentre Martitegui y Pérez de Santa María 1843-1912 fue Ministro de Guerra en julio de 1903 y en enero de 1905.
[3] Eduardo Cobián Roffignac, 1857-1918, fue un abogado con despachos en Valladolid, Chinchón y Getafe, que fue ministro de Marina en julio de 1903, y en 1905, para convertirse en el líder del “villaverdismo” en este año, pero esta facción duró poco unida, y en 1906 se rompió, pasando Cobián, Alba, Gasset y Burell al Partido Liberal. Luego fue ministro de Hacienda en febrero de 1910, teniendo como consejero a Flores de Lemus, que le elaboró un proyecto de reforma de las utilidades.
[4] Augusto González-Besada Mein, 1865-1919 fue un gallego de Pontevedra, nacido en una familia con abundantes políticos, pues fue hijo de Basilio González Besada, y padre de Carlos González-Besada Giraldez. Fue ministro de Hacienda en julio de 1903, de Gobernación en enero de 1905, de Fomento en enero de 1907, de Hacienda en septiembre de 1908, y de Hacienda
[5] Gabino Bugallal Araújo, conde de Bugallal, 1861-1932, fue ministro de Instrucción Pública en julio de 1903, ministro de Gracia y Justicia en mayo de 1920. Ejerció la Presidencia en 1921. Fue ministro de Economía en 1931, último gobierno de Alfonso XIII, y defendió la postura del uso de la fuerza contra los republicanos en abril de 1931.